Page 12 - San Miguel 2024 mayo
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u  la vida del otro es el mismo que se debe a la propia   aquel de los otros es esencial ante la proliferación y
        existencia».Ayudar  al  suicida  a  quitarse  la  vida  es,   reivindicación de nuevos derechos que avanza la teo-
        por tanto, una ofensa objetiva contra la dignidad de   ría de género. Esta ideología «presenta una sociedad
        la persona que lo pide, aunque con ello se cumpliese   sin diferencias de sexo, y vacía el fundamento antro-
        su deseo: «debemos acompañar a la muerte, pero no    pológico de la familia» (Francisco, Exhort. ap. Amo-
        provocar la muerte o ayudar cualquier forma de suici-  ris laetitia, n. 56). Por tanto, resulta inaceptable que
        dio. Debe recordarse que se debe privilegiar siempre   «algunas ideologías de este tipo, que pretenden res-
        el derecho al cuidado y al cuidado para todos, para   ponder a ciertas aspiraciones a veces comprensibles,
        que los más débiles, en particular los ancianos y los   procuren imponerse como un pensamiento único que
        enfermos, nunca sean descartados. La vida es un de-  determine incluso la educación de los niños.
        recho, no la muerte, que debe ser acogida, no sumi-      Por lo tanto, debe rechazarse todo intento de ocul-
        nistrada. Y este principio ético concierne a todos, no   tar la referencia a la evidente diferencia sexual entre
        solo a los cristianos o a los creyentes» (Francisco, Au-  hombres y mujeres: «no podemos separar lo que es
        diencia general, 9 febrero 2022). Como ya se ha dicho,   masculino y femenino de la obra creada por Dios, que
        la dignidad de cada persona, por débil o sufriente que   es anterior a todas nuestras decisiones y experiencias,
        sea, implica a la dignidad de todos.                 donde hay elementos biológicos que es imposible ig-
                      La teoría de género                    norar» ” (Ibidem). Sólo cuando cada persona humana
            la  Iglesia  destaca  los decisivos elementos  críti-  puede reconocer y aceptar esta diferencia en recipro-
                                                             cidad es capaz de descubrirse plenamente a sí misma,
        cos presentes en la teoría de género. A este respec-  su dignidad y su identidad.
        to, el Papa Francisco recordó: «el camino hacia la paz
        exige el respeto de los derechos humanos, según la                  El cambio de sexo
        sencilla pero clara formulación contenida en la Decla-   Sobre la necesidad de respetar el orden natural de
        ración Universal de los Derechos Humanos, cuyo 75    la persona humana, el Papa Francisco enseña que «lo
        aniversario hemos celebrado recientemente. Se trata   creado nos precede y debe ser recibido como un don.
        de principios racionalmente evidentes y comúnmen-    Al mismo tiempo, somos llamados a custodiar nuestra
        te aceptados. Desgraciadamente, los intentos que se   humanidad, y eso significa ante todo aceptarla y res-
        han producido en las últimas décadas de introducir   petarla como ha sido creada» ” (Ibidem). De ahí que
        nuevos derechos, no del todo compatibles respecto a   toda  operación  de  cambio  de  sexo,  por regla  gene-
        los definidos originalmente y no siempre aceptables,   ral, corra el riesgo de atentar contra la dignidad única
        han dado lugar a colonizaciones ideológicas, entre las   que la persona ha recibido desde el momento de la
        que ocupa un lugar central la teoría de género, que   concepción. Esto no significa que se excluya la posi-
        es extremadamente peligrosa porque borra las dife-   bilidad que una persona afectada por anomalías geni-
        rencias en su pretensión de igualar a todos» (Francis-  tales, que ya son evidentes al nacer o que se desarro-
        co, Discurso a los miembros del Cuerpo Diplomático   llan posteriormente, pueda optar por recibir asistencia
        acreditado ante la Santa Sede para la presentación de   médica con el objetivo de resolver esas anomalías. En
        felicitaciones por el Año Nuevo, 8 enero 2024).      este caso, la operación no constituiría un cambio de
            Con respecto a la teoría de género,  sobre cuya   sexo en el sentido que aquí se entiende.
        consistencia científica se debate mucho en la comuni-
        dad de expertos, la Iglesia recuerda que la vida huma-                  Conclusión
        na, en todos sus componentes, físicos y espirituales,    Es en este espíritu, con esta Declaración, en el que
        es un don de Dios, que debe ser acogido con gratitud   la Iglesia exhorta ardientemente a que el respeto de
        y puesto al servicio del bien. Querer disponer de sí   la dignidad de la persona humana, más allá de toda
        mismo, como prescribe la teoría de género, sin tener   circunstancia,  se sitúe en  el centro del compromiso
        en cuenta esta verdad fundamental de la vida humana   por el bien común y de todo ordenamiento jurídico.
        como un  don,  no  significa  otra  cosa que  ceder  a  la   En efecto, el respeto de la dignidad de todos y de cada
        vieja tentación de que el ser humano se convierta en   uno, es la base indispensable para la existencia misma
        Dios y entre en competencia con el verdadero Dios del   de toda sociedad que pretenda fundarse en el dere-
        amor que nos revela el Evangelio.                    cho justo y no en la fuerza del poder. Es sobre la base
            Un segundo aspecto sobre la teoría de género es   del reconocimiento de la dignidad humana como se
        que pretende negar la mayor diferencia posible entre   sostienen los derechos humanos fundamentales, que
        los seres vivos: la diferencia sexual.  Esta diferencia   preceden y sustentan toda convivencia civilizada.v
        constitutiva no sólo es la mayor, sino también la más               Víctor Manuel Cardinal Fernández
        bella y la más poderosa: logra, en la pareja varón-mu-                                       Préfecto
        jer, la reciprocidad más admirable y es, por tanto, la
        fuente de ese milagro que nunca deja de asombrarnos     ”Un pueblo que mata a sus hijos es un pue-
        que es la llegada de nuevos seres humanos al mundo.      blo sin futuro”. — San Juan Pablo II, 1996
            En este sentido, el respeto del propio cuerpo y de


        12     SAN MIGUEL  mayo-junio-julio 2024                                      www.revistasanmiguel.org
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