Page 13 - San Miguel 2024 marzo
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inconscientes: suceden, son experiencias de la vida.   nunca respondió al mal con el mal, pero en su alma
        No somos responsables de la ira en su surgimiento,   experimentó este  sentimiento  y,  en  el  caso  de  los
        pero sí siempre en su desarrollo. Y a veces es bueno   mercaderes en el Templo, realizó una acción fuerte
        que la ira se desahogue de la manera adecuada. Si    y profética, dictada no por la ira, sino por el celo de
        una persona no se enfadara nunca, si no se indignara   la casa del Señor (cfr. Mt 21, 12-13). Debemos distin-
        ante la injusticia, si no sintiera algo que le estremece   guir bien: una cosa es el celo, la santa indignación,
        las entrañas ante la opresión de un débil, entonces   otra cosa es la ira, que es mala.
        significaría que esa persona no es humana, y mucho       Nos  corresponde  a  nosotros,  con  la  ayuda  del
        menos cristiana.                                     Espíritu Santo, encontrar la justa medida de las pa-
            Existe una santa indignación, que no es la ira,   siones, educarlas bien para que se dirijan hacia el
        sino un movimiento interior, una santa indignación.   bien, y no hacia el mal. v
        Jesús la conoció varias veces en su vida (cfr. Mc 3,5):                                                          Papa Francisco


               No rendirse nunca                                                        cativo en el mundo.
               La lucha de la revista San Miguel                                        Sin embargo, po-
                                                                                                  mencionar
                                                                                        demos
            por la justicia económica para todos                                        lo que diferenciaba
            es una batalla a largo plazo, llena de                                      al  Abbé  Pierre  de
            obstáculos,  ya  que  nos  enfrentamos                                      Louis Even, esto era
            a fuerzas poderosas, pero nunca de-                                         que el Abbé Pierre
            bemos desanimarnos ni rendirnos.                                            se enfrentaba a las
            Como escribió el Papa Juan Pablo II                                         consecuencias de la
            en su carta encíclica de 1987 Sollicitu-                                    pobreza (quedarse
            do rei socialis (n. 30): “Quien quisiera                                    sin hogar por falta
            renunciar a la tarea, difícil pero exal-                                    de dinero), mientras
            tante, de elevar la suerte de todo el              Abbé Pierre              que  Louis  Even  se
            hombre y de todos los hombres, bajo   enfrentaba a las causas mismas, a la raíz de la pobreza: el
            el pretexto del peso de la lucha y del   actual sistema financiero que crea dinero en forma de deuda.
            esfuerzo  incesante  de  superación,  o   Como se ha dicho a menudo en Hacia el mañana, aunque
            incluso por la experiencia de la derro-  hay muchas maneras de ayudar al prójimo y de socorrer a los
            ta y del retorno al punto de partida,   pobres, los hambrientos y los sintecho, por ejemplo envian-
            faltaría a la voluntad de Dios Creador.”  do donativos a organizaciones caritativas, lo que es infinita-
               Además de Louis Even, otro fran-   mente mejor es corregir el problema en su origen, atacar las
            cés es conocido por su firmeza de     causas mismas de la pobreza, como escribió el Papa Pablo VI
            palabra y su compromiso con la justi-  en su carta encíclica Populorum progressio (n. 75) de 1967:
            cia social. El Abbé Pierre (1912-2007),   “ Más que nadie, el que está animado de una verdadera ca-
            cuyo verdadero nombre era Henri       ridad es ingenioso para descubrir las causas de la miseria,
            Grouès, era un sacerdote católico que   para encontrar los medios de combatirla, para vencerla con
            en 1949 fundó el movimiento Emaús,    intrepidez.” Así pues, sin quitar nada a la obra del Abbé Pie-
            una organización benéfica dedicada a   rre, el apostolado de Louis Even se sitúa a otro nivel, el de la
            ayudar a los sintecho y a las personas   superación de la pobreza en sus raíces.
            con dificultades. Destaca su sonoro       Para quienes se sientan tentados a desanimarse por la lu-
            llamamiento por radio, en febrero de   cha contra la injusticia, he aquí lo que escribió el Abbé Pierre:
            1954, para ayudar a los sintecho de
            Francia,  que  se  morían  literalmente   Seguiré creyendo, aunque los demás pierdan la esperanza.
            de frío durante aquel crudo invierno.   Seguiré amando, aunque otros propaguen el odio.
            De hecho, durante más de diez años,   Seguiré construyendo, aunque otros destruyan.
            el Abbé Pierre encabezó  la lista de   Seguiré hablando de paz, incluso en medio de la guerra.
            personalidades más queridas por los   Seguiré iluminando, incluso en medio de la oscuridad.
            franceses.                            Seguiré sembrando, aunque otros pisoteen la cosecha.
                                                  Y seguiré gritando, aunque otros callen.
               Al igual que Louis Even, el com-   Y dibujaré sonrisas en rostros llorosos.
            promiso del Abbé Pierre con la justicia   Y llevaré alivio cuando se vea el dolor.
            social sigue siendo un ejemplo inspi-  Y llevaré alegría donde sólo hay tristeza.
            rador de la capacidad de una persona   Invitaré a caminar a quienes han decidido detenerse...
            para tener un impacto positivo signifi-
                                                  Y extenderé mis brazos a quienes se sientan agotados. v


        www.revistasanmiguel.org                                             SAN MIGUEL  marzo-abril 2024    13
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