Page 12 - San Miguel 2024 marzo
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La única ira deseable


                    es la ira contra la injusticia



            Desde comienzos de 2024, durante sus audien-     razonar y de sentir.
        cias generales de los miércoles, el Papa Francisco       Cuando la relación alcanza este nivel de degene-
        ha abordado el tema de los vicios y las virtudes, re-  ración, ya se ha perdido la lucidez. La ira hace perder
        cordándonos que la vida es una batalla espiritual,   la lucidez. Porque, a veces, una de las características
        y que debemos huir continuamente de las tentacio-    de la ira, es la de no calmarse con el tiempo. En esos
        nes -los vicios, o pecados capitales- combatiéndo-   casos, incluso la distancia y el silencio, en lugar de
        las con buenos pensamientos, las virtudes que les    calmar el peso de los malentendidos, lo magnifican.
        son contrarias. Después de haber abordado en los     Por ese motivo, el apóstol Pablo -como hemos escu-
        miércoles anteriores la gula y la lu-                                 chado- recomienda a sus cristianos
        juria, el 31 de enero el Santo Padre                                  que aborden inmediatamente el
        se ocupó de la ira, recordando que                                    problema e intenten la reconcilia-
        es siempre mala, excepto en un                                        ción: «No permitan que la noche
        caso: la indignación ante la injusti-                                 los sorprenda enojados» (Ef 4, 26).
        cia, como Jesús, manso y humilde                                      Es importante que todo se resuelva
        de corazón, mostró una ira “san-                                      inmediatamente, antes de la pues-
        ta” cuando expulsó a los fariseos                                     ta del sol. Si durante el día surge al-
        del Templo, diciéndoles: “Habéis                                      gún malentendido y dos personas
        hecho de la casa de mi Padre una                                      dejan de entenderse, percibiéndo-
        cueva de ladrones” (Mt 21, 12-13).                                    se de pronto alejadas, no hay que
            Queridos hermanos y herma-                                        entregar la noche al diablo. El vicio
        nas, ¡buenos días! En estas sema-                                     nos  mantendría  despiertos  en  la
        nas estamos tratando el tema de los vicios y las virtu-  oscuridad, rumiando nuestras razones y los errores
        des, y hoy nos detenemos a reflexionar sobre el vicio   incalificables que nunca son nuestros y siempre del
        de la ira. Es un vicio particularmente tenebroso, y es   otro. Así es: cuando una persona está dominada por
        quizás el más simple de reconocer desde un punto     la ira, siempre dice que el problema está en la otra
        de vista físico. La persona dominada por la ira difícil-  persona; nunca es capaz de reconocer sus propios
        mente logra disimular este ímpetu: lo reconoces por   defectos, sus propias faltas.
        los movimientos del cuerpo, por la agresividad, por la   En el “Padre nuestro”, Jesús nos hace orar por
        respiración agitada, por la mirada brusca y enojada.  nuestras relaciones humanas, que son un terreno
            En su manifestación más aguda, la ira es un vicio   minado: un plano que nunca está en equilibrio per-
        que no da tregua. Si nace de una injusticia padecida   fecto. En la vida tenemos que tratar con personas
        (o considerada como tal), a menudo no se desata      que están en deuda con nosotros; del mismo modo,
        contra el culpable, sino contra el primer desafortu-  ciertamente nosotros no siempre hemos amado a
        nado con el que uno se encuentra. Hay hombres que    todos en la justa medida. A algunos no les hemos
        contienen su ira en el lugar de trabajo, mostrándose   devuelto el amor que les debemos. Todos somos
        tranquilos y compasivos, pero que una vez llegados   pecadores,  todos,  y  todos  tenemos  la  cuenta  en
        a su casa se vuelven insoportables para la esposa    números rojos: ¡no lo olviden! Por lo tanto, todos
        y los hijos. La ira es un vicio desenfrenado: es ca-  tenemos que aprender a perdonar para ser perdo-
        paz de quitarnos el sueño y de hacernos maquinar     nados. Las personas no están unidas si no practican
        continuamente en nuestra mente, sin que logremos     también el arte del perdón, siempre que esto sea hu-
        encontrar una barrera para los razonamientos y pen-  manamente posible. Lo que contrarresta la ira es la
        samientos.                                           benevolencia, la amplitud de corazón, la mansedum-
            La ira es un vicio que destruye las relaciones hu-  bre, la paciencia.
        manas. Expresa la incapacidad de aceptar la diver-       Sobre el tema de la ira, hay que decir una última
        sidad del otro, especialmente cuando sus opciones    cosa. Es un vicio terrible, hemos dicho, está en el
        vitales difieren de las nuestras. No se detiene ante   origen de las guerras y la violencia. El poema de la
        los malos comportamientos de una persona, sino       Ilíada describe “la ira de Aquiles”, que será causa de
        que lo arroja todo al caldero: es el otro, el otro tal   “infinitos lutos”. Pero no todo lo que nace de la ira
        y como es, siempre es el otro el que provoca la ira   es malo. Los antiguos eran muy conscientes de que
        y el resentimiento. Se empieza a detestar el tono de   hay una parte irascible en nosotros que no puede ni
        su voz, sus banales gestos cotidianos, sus formas de   debe negarse. Las pasiones son hasta cierto punto


        12     SAN MIGUEL  marzo-abril 2024                                           www.revistasanmiguel.org
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