El origen de todos los problemas
¿Por qué la revista San Miguel insiste en la cuestión del dinero ? Es porque prácticamente todos los problemas políticos, económicos y sociales son en su mayoría problemas de dinero.
No pretendemos hacerles creer que la cuestión monetaria sea la única que debe resolverse, la única que debe ocuparnos, ni siquiera que sea el problema más grande. Pero este problema es muy urgente, porque todo lo demás se topa con un problema de dinero. El desorden en el sistema financiero es tal que estropea todo lo demás.
El dinero es importante en la actualidad, no porque el dinero sea la riqueza, sino porque la riqueza no se distribuye sin dinero. La riqueza, es decir los bienes útiles se ríen en tu cara y tu te mueres de hambre frente a las tiendas llenas de productos si no tienes dinero.
No vivimos de acuerdo con la capacidad de nuestro país para mantenernos, sino de acuerdo con la presencia de dinero en la casa. El dinero es escaso, y debido a que el dinero es escaso, la riqueza es eliminada. Obviamente es un desastre, pero un desastre que agrada enormemente a aquellos que tienen el control del dinero.
El dinero, creación del hombre
Si la cantidad de dinero en la tierra dependiera de la temperatura o de algún otro factor fuera del control del hombre, uno estaría obligado a aceptar las consecuencias. Tal vez sea la mentalidad que tenemos la que ha mantenido de forma permanente un sistema fraudulento. Se nos predicó tanto la paciencia, que terminamos aceptando este sistema, aún siendo casi degollados por el mismo.
El dinero no es hecho por Dios, ni por los ángeles, ni por los fenómenos naturales, sino por el ser humano. Y no por ser humanos socialmente inspirados. Cuando hay una guerra el dinero surge en miles de millones en todos los países del mundo de forma milagrosa, pero cuando se trata de la producción de bienes se encuentra escaso, claramente vemos que el motivo de la creación de dinero no es ni social, y ni siquiera humano.
Algunas personas ignorantes dirán que la cantidad de dinero creado no depende de los hombres, porque es necesario limitar el dinero de acuerdo con el oro disponible.
Este cuento ya no es válido el día de hoy. Los hombres ciertamente no fueron llevados a las minas de oro durante las dos grandes guerras, mientras que el dinero nació mágicamente para financiar la matanza. Por otro lado, durante los diez años de crisis en Canadá, el oro se fue acumulando en Estados Unidos, en las bóvedas de Fort Knox ; sin embargo, Estados Unidos al mismo tiempo tenía 13 millones de desempleados por falta de dinero. Canadá nunca ha producido tanto oro como lo hizo durante la crisis, y nunca le falto tanto dinero como en esa época.
Falta dinero, cuando aquellos que lo hacen y lo destruyen, destruyen más de lo que lo hacen.
El dinero abunda, cuando estos mismos hombres emiten más de lo que recuerdan.
¿Qué es el dinero ? El dinero en efectivo es cualquier instrumento generalmente aceptado a cambio de productos. La naturaleza del instrumento no importa, siempre y cuando sea universalmente aceptado en el país.
Si compro una silla en cien dólares : puedo pagarlo con diez billetes de diez dólares o un billete de cien dólares, o incluir en mi pago monedas de uno o dos dólares. La moneda de metal, el billete de papel, ambos son dinero, no es el material que compone el dinero lo que da su valor. En un billete de diez o de cien dólares existe el mismo material.
Si tengo una cuenta en el banco, también puedo pagar la silla con cheque. El cheque desplaza el dinero de mi cuenta a la cuenta del comerciante. Puedo retirar todo el dinero que tengo en mi cuenta a través de cheques. También puedo simplemente hacer una transferencia bancaria. Así que todo lo que hay en las cuentas bancarias es dinero.
Pero ¿Acaso las cuentas bancarias no se abren a partir de los ahorros de dinero en monedas o papel de una persona ? Lejos de la realidad es esto…
Hay al menos diez veces más dinero en las reservas bancarias (que son una forma electrónica de dinero) en Canadá que la cantidad total de dinero en efectivo en el país (monedas o billetes).
Origen de las cuentas bancarias
Las cuentas bancarias no se abren solo a partir de ahorros. La mayoría de las cuentas bancarias son creadas por el propio banquero, no por el ahorrador.
Por ejemplo, si decido ahorrar cien dólares y los llevo al banco, al abrir una cuenta de ahorros, en el banco toman mis cien dólares que llevo en dinero en efectivo, lo colocan en un cajón y en una computadora abren una cuenta a mi nombre, teclean la cifra de 100 dólares y a partir de ese momento mi cuenta ya tiene esa cantidad.
Pero ahora veamos el caso de una persona que solicita un préstamo al banco. Esa persona no lleva dinero en efectivo al banco, pide ese dinero, solicita un préstamo por 20, 000 dólares. ¿Qué hace el banquero ? ¿Le da los $ 20,000 en efectivo ? Normalmente no. Después de firmar un contrato con las debidas garantías, nuevamente en el banco abren una cuenta a nombre de esa persona y teclean en la computadora la suma de $ 20,000. La cuenta bancaria del prestatario ahora es de $20,000.
¿De dónde saca el banco esos 20,000 dólares ? No lo saca de su cajón ; no disminuye la cuenta de ninguna persona ; tampoco lo saca de su bolsillo ; y aun así agrega $ 20,000 a una cuenta. Hay $ 20,000 más que antes en el total de cuentas bancarias en el país. ¿De dónde viene este dinero ? De un simple tecleo de cifras en una computadora.
Las cuentas bancarias crecen de dos maneras : la primera es a través de la contribución del ahorrador, aquí se desplaza el efectivo al banco ; y, en segundo lugar, a través de un préstamo, se inyecta dinero nuevo que antes no existía, a partir de una deuda.
Entonces, ¿es así como se crea el dinero ? Sin duda alguna, esos $ 20,000 son dinero. El dinero que se creo a partir de una deuda, dinero que antes no existía, así de fácil.
El ahorrador trabaja y se priva de muchas cosas para hacer crecer su cuenta y es recompensado con el 1% de su ahorro, siempre y cuando, el dinero permanezca en manos del banco.
Cuando una persona solicita un préstamo, el banco teclea la suma de 20.000 dólares y se recompensa a sí mismo pidiéndole el 5% en interés a esa persona sobre la cantidad total.
Endeudamiento público
La deuda pública funciona de la misma manera. Acompañemos al ministro de finanzas al banco, por un préstamo de mil millones.
El ministro pasa al banco un "bono", u "obligación", es decir, una promesa de reembolso ; "prometo pagar al banco la suma de mil millones de dólares, en 20 años, más el 5% en intereses durante veinte años".
¿Qué hace el banco ? ¿Saca de su cajón mil millones efectivo ? Por supuesto que no. Mucho menos de su bolsillo, ni tampoco redujo la cuenta de nadie.
El banco hace exactamente lo mismo que hizo hace un momento. Tecleó en una computadora el nombre del ministro de finanzas y acreditó un millón al gobierno. Ahora el ministro de finanzas puede hacer uso de esos mil millones adicionales, para pagar o comprar cualquier cosa.
Es una cuenta que se crea y se aumenta sin disminuir otra. ¿Quién puede hacer esto a excepción del banquero ? ¿Quién sino él puede prestar sin reducir su propia cuenta ?
Para prestar dinero sin tomarlo de otro lado, hay que fabricarlo, y eso es exactamente lo que hace el banquero.
Pero ¿es esto algo bueno o es algo malo ?
La fabricación de dinero a partir de un simple tecleo de cifras en una computadora, es un magnífico invento moderno. Dado que la producción moderna de bienes útiles es muy fácil, es una suerte que la producción de dinero moderno sea fácil. Esto permitiría, a través de la contabilidad, tener tanto dinero como sea necesario para vender toda la producción.
No obstante, el dinero no va en absoluto de acuerdo con la producción. Falta dinero frente a los productos. ¿Por qué pasa esto ? Por el deseo de quienes tienen en sus manos el control del dinero.
Entonces cualquier creación de dinero crea al mismo tiempo una deuda ; se trate de una deuda privada o deuda pública. Ambos quitan dinero a la sociedad, a través de precios altos o impuestos, para lograr reembolsar al banco.
El dinero está necesariamente condenado a la escasez, ya que nace a condición de morir en cantidades mayores de las que nació. Si hay dinero, es simplemente por el aumento de la deuda en alguna parte.
Cuando la deuda pública aumenta, el interés total aumenta ; cuando aumenta el interés anual, los impuestos aumentan ; cuando los impuestos suben, el dinero disminuye, incluso si los precios aumentan ; cuando el dinero disminuye, nos privamos de lo que necesitamos o queremos ; cuando comenzamos a privarnos, la producción disminuye y el desempleo se instala. El resto ya lo conocemos.
Todo esto parece muy simple y fácil de entender, cuando se despoja de todo lo que lo rodea, lo complica y lo camufla. Pero cuando se mantiene a los ciudadanos en la ignorancia, se atribuye este resultado al gobierno de turno. En lugar de ponernos de acuerdo contra el enemigo en común, entramos en luchas políticas unos contra otros.
Desorden
El dinero fue instituido para servir ; y se ha convertido en un instrumento de esclavitud. El dinero viene al mundo en el libro de aquellos que se aprovechan, creando deudas matemáticamente impagables.
¿Cómo esperamos que el dinero que comienza de esta manera juegue un papel favorable ? Nace para el beneficio de unos pocos explotadores y poniendo a los gobiernos a sus pies, controlándolos, a través del crédito.
Mientras tanto, el ser humano, el niño que nace, ya es esclavo de la deuda. Al nacer, asume su parte de la deuda pública de su país. Nace endeudado y lo seguirá estando todos los días de su vida. El sistema es responsable de aumentar la deuda. El amo es el dinero ; el esclavo es el ser humano. ¡Que desorden !
Es un verdadero desorden ver como el dinero es escaso en un mundo de abundante producción. Dinero que nace propiedad de unos pocos individuos, mientras que es la monetización de la propiedad pública.
Mientras este desorden no se haya corregido, parece no tener mucho sentido tratar de establecer un poco de orden en las relaciones sociales.
Los peregrinos de San Miguel entienden muy bien este gran desorden, la falta de dinero es la fuente de todo problema social, y es por eso que insisten tanto en remediarlo. La aplicación de las propuestas de un sistema de Democracia Económica, llamado Crédito Social por el ingeniero escocés Clifford Hugh Douglas, colocaría al dinero en su papel de servidor, un instrumento para distribuir a los hombres la abundancia hecha para ellos, ya sea que provenga directamente de la Providencia, o si es el producto del trabajo, del progreso o de la ciencia aplicada. Los hombres, todos los hombres, todos y cada uno, deben tener su parte.
