Ave María
Queridos suscriptores, este año 2018, "va a ser raro". Va a ser un año de desafiar las expectativas. No voy a decir que va a ser malo". "Solo que va a ser sorprendente".
El hecho es que no pretendo ser un profeta, aunque Dios me ha dado la Gracia para intuir cosas. Lo que puedo decir es que por el trabajo misionero que desempeño, tomo mucha información todo el tiempo, y he aprendido a leer los "signos de los tiempos", por así decirlo.
Y apenas iniciamos el año tenemos grandes signos : El 12 de enero Lilianne Ploumen, arquitecta del Fondo de "aborto seguro", fue honrada por el Vaticano con la medalla que la acredita como Caballero de la Orden Pontificia de San Gregorio Magno.
El Instituto Lepanto pudo confirmar, a través de una transmisión de radio holandesa del 22 de diciembre de 2017, que « Ploumen efectivamente recibió el honor. En un breve video que promociona la transmisión, Ploumen muestra la medalla y dice que la recibió del Papa. »
En otra perla : El obispo de la diócesis alemana de Osnabrück pide que la Iglesia bendiga las uniones homosexuales ya que según el : « los tabúes no conducen a nada y crean confusión »
Paul Zulehner, sacerdote austriaco que ayudó en octubre a organizar la iniciativa Pro Papa Francisco, acaba de entregar, el 6 de enero de 2018, una entrevista al periódico austriaco Kurier, donde enfatiza que « antes de las mujeres sacerdotes, habrá sacerdotes casados ».
El recientemente nombrado miembro de la pontificia academia para la vida, el P. Maurizio Chiodi defiende en la Gregoriana el uso de anticonceptivos basándose en Amoris Laetitia…
Ante tanta negación del pecado, tanta confusión en enunciados y escritos nacidos en las altas esferas de la jerarquía de la Iglesia, y también en las predicas y consejos de muchos sacerdotes, nosotros los laicos de a pie, nos preguntamos : ¿Qué está en juego ?
Y nos atrevemos a responder como algunos pocos, que ni más ni menos, están en juego : la Sagrada Escritura, la Tradición y el Magisterio Perenne de la Iglesia. Está en peligro de derrumbe todo el edificio moral de la Iglesia. Está en peligro la enseñanza moral de San Juan Pablo II :
En el caso de los preceptos morales positivos, la prudencia ha de jugar siempre el papel de verificar su incumbencia en una determinada situación, por ejemplo, teniendo en cuenta otros deberes quizás más importantes o urgentes. Pero los preceptos morales negativos, es decir, los que prohíben algunos actos o comportamientos concretos como intrínsecamente malos, no admiten ninguna excepción legítima ; no dejan ningún espacio moralmente aceptable para la creatividad de alguna determinación contraria. Una vez reconocida concretamente la especie moral de una acción prohibida por una norma universal, el acto moralmente bueno es sólo aquel que obedece a la ley moral y se abstiene de la acción que dicha ley prohíbe. (Encíclica Veritatis Splendor, no. 67)
Está en peligro la enseñanza del Concilio de Trento :
Si alguno dijere, que es imposible al hombre aun justificado y constituido en gracia, observar los mandamientos de Dios ; sea excomulgado. Canon XVIII sobre la justificación.
Y la enseñanza de la Sagrada Escritura :
No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea de medida humana. Dios es fiel, y él no permitirá que seáis tentados por encima de vuestras fuerzas, sino que con la tentación hará que encontréis también el modo de poder soportarla. 1ª Cor 10,13
Y si estamos ante otro Evangelio, ante otra Tradición y Magisterio, ¿Cuál es la única actitud que nos compete a nosotros que por gracia anhelamos mantenernos fieles a Dios, seamos obispos, sacerdotes, diáconos, religiosos o seglares ? La Resistencia :
Me sorprende que hayáis abandonado tan pronto al que os llamó por la gracia de Cristo para seguir otro evangelio ; aunque no es que haya otro, sino que hay algunos que os inquietan y quieren cambiar el Evangelio de Cristo.
Pero, aunque nosotros mismos o un ángel del cielo os anunciásemos un evangelio diferente del que os hemos predicado, ¡sea anatema ! Como os lo acabamos de decir, ahora os lo repito : si alguno os anuncia un evangelio diferente del que habéis recibido, ¡sea anatema ! Gal 1,6-9