"Por eso prepárate, oh hombre. Si conoces las señales del Anticristo, no sólo las has de tener en tu memoria ; sino que has de compartirlas con tu entorno. Si tienes un hijo según la carne, no dudes en instruirlo. Si eres maestro, prepara a tus hijos espirituales, para que no tomen lo falso por verdadero, pues este misterio está ya obrando." (San Cirilo de Jerusalén)
Amenaza Anticristiana
Hablar sobre el Anticristo no es asunto fácil, pues en esta figura, que según muchos testimonios fidedignos ha de presentarse al final de los tiempos, se manifestará a plenitud el'misterio de la iniquidad'(cf. 2 Tes 2,7). Por tanto, el Anticristo constituirá una amenaza para el mundo entero. Pero la complejidad del tema no puede ser pretexto para callar, menos aún en un tiempo en que las amenazas anticristianas son evidentes, a pesar de que muchos no las identifican como tales o incluso las evitan, causando así una confusión para los fieles.
Sin lugar a dudas, el anuncio debe enfocarse en el mensaje salvífico de Cristo, que es la Redención del hombre y su posibilidad de retorno a la Casa del Padre. Pero tampoco se puede cerrar los ojos ante el poder que el Diablo ejerce en este mundo ; pues él, empujado por su mala intención, intenta confundir y arrastrar al hombre para unirlo a la rebelión que él mismo inició en contra de Dios. De esta manera, quiere erigir un perverso Reino del Mal.
Las figuras anticristianas no siempre son tan fáciles de identificar como lo fueron aquellos dictadores que provocaron tanta desolación y destrucción en los siglos pasados. Sin embargo, las masas tampoco supieron identificar a estos embusteros en el primer momento ; sino que solamente los reconocieron como enemigos de la humanidad cuando sus malas obras se hicieron demasiado evidentes.
Por ello, se requiere vigilancia. En primera instancia son los cristianos quienes, conociendo la voz de su Pastor, deberían ser capaces de discernir qué es lo que viene de su Señor y qué es lo que no procede de Él. Pero esta diferenciación no siempre es tan sencilla, pues Satanás puede presentarse como ángel de luz (cf. 2 Cor 11,14). Por ello, el espíritu de discernimiento debe desenmascararlo con claridad. Como católicos, esperamos que la Iglesia sepa advertirnos a tiempo de los peligros. Pero tampoco podemos poner ahí toda nuestra esperanza, pues los pastores de la Iglesia pueden errar y no saber medir e identificar los peligros de la sutil seducción anticristiana.
Puesto que llevo ya bastante tiempo observando los avances anticristianos, y me doy cuenta de que cada vez se expanden y se refuerzan más, e incluso quieren influenciar a la Iglesia, siento la responsabilidad de hacer aquello que advierte San Cirilo en la frase citada al inicio.
Espero que mis palabras sirvan para que estemos mejor preparados, en un momento en que el misterio de la iniquidad en el espíritu anticristiano se difunde cada vez más, preparando el camino para la posible venida de un nuevo Anticristo. Y lo que más quisiera es que este tema sirva para que cada uno de los lectores se coloque su armadura espiritual (cf. Ef 6), tan necesaria en estas circunstancias, para poder ofrecer resistencia a los poderes de la oscuridad.
A lo largo del tema, me abstendré de hacer especulaciones osadas, que lamentablemente suelen surgir alrededor del tema del Anticristo. En el momento en que dicto esta conferencia (abril de 2018) no podría decir que he identificado a una persona concreta como el Anticristo o como directo precursor del mismo. Pero, eso sí, veo que está obrando en el mundo el espíritu del Anticristo, que está vivo en sus seguidores.
No existe ninguna incertidumbre respecto al desenlace de la batalla entre la luz y las tinieblas, pues la victoria de Nuestro Señor Jesucristo es indudable. Al final de los tiempos, el Diablo será arrojado al lago de fuego y azufre, y allí mismo serán precipitados la Bestia y el Falso Profeta (cf. Ap 20,9-10). Nosotros, por nuestra parte, estamos llamados a enrolarnos en el ejército del Señor para este combate espiritual, y a no rendirnos indefensos ante la creciente oscuridad.
El anticristo en las Sagradas Escrituras y en la literatura
Son muchos los cristianos que, basándose en diversos pasajes bíblicos, han llegado a la conclusión de que vendrá un Anticristo al final de los tiempos, antes de la Segunda Venida de Cristo. Particularmente se apoyan en los textos del Apocalipsis y en otras fuentes literarias, que proporcionan información acerca del adversario de Cristo.
El anticristo en las Sagradas Escrituras
La Sagrada Escritura afirma que han aparecido muchos anticristos. El apóstol San Juan, por ejemplo, escribe :
"Hijos míos, ha llegado la última hora. Habéis oído que vendría un Anticristo ; y la verdad es que han aparecido muchos anticristos. Por eso nos damos cuenta que ha llegado la última hora. Salieron de entre nosotros, aunque no eran de los nuestros. Pues si hubiesen sido de los nuestros, habrían permanecido con nosotros. Así se ha puesto de manifiesto que no todos son de los nuestros" (1Jn 2,18-19).
Este pasaje habla de varios anticristos que aparecieron, y parece referirse a ellos en un sentido amplio. Puede tratarse, por ejemplo, de personas que difundían falsas doctrinas, confundiendo e induciendo a error a los fieles. Otro versículo de las cartas de San Juan parece confirmar esta interpretación : "Han venido al mundo muchos seductores negando que Jesucristo haya venido en carne mortal. Ése es el Seductor y el Anticristo."
Si reflexionamos acerca de este concepto, podremos constatar que a lo largo de la historia hubo muchas corrientes que contradijeron la enseñanza del evangelio : escuelas filosóficas que niegan la existencia de una verdad revelada ; sistemas políticos de dominio ; persecuciones activas y pasivas ; religiones y cultos post-cristianos…
La presencia anticristiana puede "encarnarse" en personas concretas ; pero también se puede hablar de un "espíritu anticristiano", que se manifiesta, por ejemplo, en ciertas corrientes de pensamiento.
Sin duda, los primeros cristianos habrán visto como'anticristos'a aquellos emperadores romanos que con tanta crueldad los perseguían. De hecho, en estos personajes se pueden identificar muchas de las características que posteriormente serían descritas en la literatura como propias de las figuras anticristianas. Podemos identificar gobernantes a lo largo de la historia, que tuvieron una gran similitud con el Anticristo que habrá de aparecer al final de los tiempos, y que fueron, por así decir, sus precursores. Pensemos en los visires turcos Talaat y Enver Pasha, sobre quienes pesa el genocidio de los cristianos armenios ; en los líderes soviéticos Lenin y Stalin ; en el dictador Adolf Hitler ; en el dirigente comunista Mao Tse-tung… por mencionar algunas de las más terribles figuras anticristianas de los siglos pasados.
Podemos hablar, entonces, de líneas paralelas. Por una parte, el término'Anticristo'hace alusión a muchas figuras ; pero, por otra parte, también se refiere a una persona en particular, el'último Anticristo', que al final de los tiempos edificará un dominio universal.
Lo que tienen en común ambas líneas es que tanto aquellos personajes anticristianos como el'último Anticristo', están inspirados por el mismo espíritu, que se enfrenta a la divinidad de Jesucristo y que rechaza su evangelio, o bien cambia su sentido, en el peor de los casos, para alcanzar sus propios fines.
Desde el punto de vista cristiano, podemos decir lo siguiente : ya sea que se trate de corrientes o de personas concretas, su inspiración y su fuerza no procede de Dios, sino que tiene origen demoníaco. Por una parte, vemos que los'anticristos'se han manifestado a lo largo de toda la historia como enemigos de Dios. Por otra parte, muchos argumentos parecen indicar que al final de los tiempos el misterio de la iniquidad se manifestará en plenitud en una persona específica. San Pablo escribe a los tesalonicenses : "El misterio de la impiedad ya está actuando. Tan solo con que sea quitado de en medio el que ahora le retiene, entonces se manifestará el Impío" (2Tes 2,7-8a).
En la misma carta a los tesalonicenses, Pablo habla en este contexto de la Segunda Venida de Cristo al final de los tiempos :
"Primero tiene que venir la apostasía y manifestarse el Hombre impío, el Hijo de la perdición, el Adversario que se alza contra todo lo que lleva el nombre de Dios o es objeto de culto, hasta el extremo de sentarse él mismo en el Santuario de Dios y proclamarse a sí mismo Dios (…) El Señor lo destruirá con el soplo de su boca, y aniquilará con la manifestación de su Venida. La venida del Impío estará señalada por el influjo de Satanás, con toda clase de milagros, signos, prodigios engañosos y todo tipo de maldades, que seducirán a los que se han de condenar por no haber aceptado el amor de la verdad que les hubiera salvado. Por eso Dios les envía un poder seductor que les hace creer en la mentira, para que sean condenados todos cuantos no creyeron en la verdad y prefirieron la iniquidad" (2Tes 2,3-4.8b-12).
El Catecismo de la Iglesia Católica (n. 675) afirma respecto a este tema :
"Antes del advenimiento de Cristo, la Iglesia deberá pasar por una prueba final que sacudirá la fe de numerosos creyentes (cf. Lc 18, 8 ; Mt 24, 12). La persecución que acompaña a su peregrinación sobre la tierra (cf. Lc 21, 12 ; Jn 15, 19-20) desvelará el "misterio de iniquidad" bajo la forma de una impostura religiosa que proporcionará a los hombres una solución aparente a sus problemas mediante el precio de la apostasía de la verdad. La impostura religiosa suprema es la del Anticristo, es decir, la de un seudo-mesianismo en que el hombre se glorifica a sí mismo colocándose en el lugar de Dios y de su Mesías venido en la carne (cf. 2 Ts 2, 4-12 ; 1Ts 5, 2-3 ;2 Jn 7 ; 1 Jn 2, 18.22)."
En la presente reflexión, quiero enfocarme en aquella figura concreta que representará al Anticristo, y cuya venida será un indicio de la proximidad del Retorno del Señor. Me parece lógico creer que vendrá esta persona concreta, pues este Anticristo se mostrará como el "redentor del mundo" y llevará así a la humanidad a renegar de Cristo. La mayoría de los autores que han escrito acerca del tema, comparten esta misma opinión.
La venida de este Anticristo estaría preparada por la difusión de los errores, por la apostasía, por la decadencia moral, por el debilitamiento interior de la Iglesia ; es decir, por todo aquello que provocan los'anticristos'siempre presentes en la historia humana. Para edificar su dominio universal, el Anticristo tendría que encontrar las formas que le permitan ejercer su control sobre todas las personas. Las posibilidades que ofrece la técnica moderna y la facilidad de manipular al hombre moderno, podrían ser herramientas útiles para ello en este tiempo.
El anticristo en la literatura
En la literatura dedicada a este tema, suele describirse al Anticristo como un personaje político dotado de un extraordinario carisma, que ofrece soluciones para los mayores problemas mundiales. El Anticristo poseerá, de acuerdo a las descripciones literarias, una enorme capacidad de atracción, de modo que a las personas les resultará difícil sustraerse de su fascinación. Hacia afuera, el Anticristo se mostrará como una persona espiritual y ornada de virtudes ; un hombre con un amplio horizonte y abierto en las cuestiones religiosas.
Para la presente reflexión, quisiera recurrir a tres autores que han escrito sobre el Anticristo. El primero es Vladimir Solowjew, con su texto titulado "Breve relato del Anticristo" ; el segundo será el sacerdote inglés Robert Benson, autor del libro "El amo del mundo" ; el tercero será Michael O´Brien, quien ha escrito una novela recientemente publicada bajo el título "El Padre Elías".
Además, recurriré al autor Antanas Maicena, que en su libro "El misterio de la iniquidad" hace una interpretación del relato del Anticristo de Solowjew.
Vladimir Solowjew : "Breve relato del Anticristo"
Este gran pensador ruso se sintió impulsado en el año 1900 a incluir y publicar su breve relato del Anticristo como parte de su obra "Tres diálogos", según lo que él mismo escribe en el prólogo de dicho libro. De hecho, fue su última obra, pues el 12 de agosto de 1900 falleció, dejándonos como legado este extraordinario relato.
En su obra, el Anticristo se presenta como una figura que progresivamente va adquiriendo influencia política. Su origen es un tanto misterioso. Su madre era una mujer cuya moral dejaba mucho que desear, pero este hecho no se tomó en cuenta en el ámbito público. El Anticristo de Solowjew posee una gran habilidad mental y una brillante inteligencia, además de tener una notable fuerza de atracción. Este hombre considera sus dones como una gran ventaja, que lo coloca por encima de los demás. Así, se siente llamado a realizar algo extraordinario en el mundo, y espera con ansias el momento de su "vocación", por así decir, para empezar a llevar a cabo su misión.
Se acerca ya a la edad de Jesús y empieza a inquietarse, pues parece que nada fuera de lo común acontece en su vida. Se cuestiona si quizá realmente Jesús es el mayor elegido, y no él mismo ; aunque se ha sentido llamado a llevar a plenitud la obra de Jesús. Cae en desesperación y se dispone a acabar con su vida, arrojándose de un precipicio. En ese mismo momento una mano lo rescata, pero no la del el Hijo de Dios ; sino la de una figura que, aunque no se presente explícitamente como tal, ciertamente es el Diablo mismo. Así, el Anticristo adquiere su iniciación en los poderes satánicos, que se le presentan como de "su Padre".
Después de esta experiencia, el Anticristo parece gozar de una particular inspiración, y su ascenso sucede a pasos agigantados. Escribe con prontitud un libro, en el que ofrece consejos concretos para solucionar los problemas políticos y sociales del mundo. Esta obra es acogida con gran entusiasmo y el renombre del Anticristo crece. Su fama llega a ser tal, que es escogido por unanimidad como presidente de toda Europa.
Su poder sigue creciendo, y su potente ejército se impone contra todos los que todavía le ofrecen resistencia ; de manera que llega a ser el soberano de todo el mundo, haciéndose proclamar como Emperador.
El Anticristo, deseoso de ganarse los corazones de las personas, empieza a dedicarse a las cuestiones de la religión. En su Imperio siguen existiendo diferentes confesiones cristianas. Por ello, convoca un concilio, y allí hace todo tipo de ofrecimientos a los jefes religiosos, para hacerles sentir su amor y beneficencia. Lo único que pide de ellos es que lo reconozcan como su único guía y protector. Para este momento, el Anticristo se ha aliado con un Falso Profeta, que confunde a las personas a través de sus señales milagrosas.
Pero no todos se someten ante la petición del Emperador. La resistencia viene de un grupo procedente de las tres confesiones cristianas presentes en el Concilio (católicos, ortodoxos y protestantes). El Anciano Juan, líder de los ortodoxos, exhorta al Anticristo a hacer una profesión de fe pública, reconociendo a Cristo como su Señor y Redentor. En ese momento, el Falso Profeta aniquila por orden del Emperador al Anciano que osó pronunciar semejante petición. Al Papa católico entonces ya no le queda duda de que este Emperador es el Anticristo, y lo condena públicamente con el "anatema". También él tiene el mismo fin que el ortodoxo Juan.
Entonces, el Anticristo pide a los cristianos que se habían aliado con él, escoger como Sumo Pontífice a su Falso Profeta, mientras los cristianos fieles tienen que huir…
Padre Robert Benson : "El amo del mundo"
Esta novela surgió después del "Breve relato del Anticristo" de Solowjew. Por la similitud en algunas de las narraciones, podría creerse que Benson conocía el texto de Solowjew y que tenían fuentes comunes en las que se inspiraron para describir al personaje del Anticristo.
Robert Benson relata la manifestación de un soberano universal, cuyo inquietante y misterioso poder lo abarca todo. Los hombres lo aplauden como una especie de nuevo Mesías, que trae al mundo un mensaje de paz. Julian Felsenburg (ese es el nombre que Benson da a la figura del Anticristo) logra poner de su parte a muchos fieles y sacerdotes, que no pueden sustraerse de su fuerza de atracción. Los sacerdotes incluso crean cultos, semejantes a las procesiones y servicios divinos que conocemos, para satisfacer a la humanidad en sus necesidades religiosas. Aparentemente ya no queda nadie que ofrezca resistencia ; solamente pequeños círculos católicos, que comprenden quién es y cómo engaña aquel soberano universal.
El mundo regido por este soberano es un mundo frío. Los cristianos ya no pueden estar entre aquellas personas que se encuentran dominadas y manipuladas por Julian Felsenburg. Huyen a Roma, buscando refugio en el Santo Padre. Felsenburg, que inició presentándose como un mensajero de paz, va desenmascarando poco a poco su verdadero rostro. Declara la guerra a aquellos que considera "enemigos del progreso", que son los cristianos. La historia termina en el bombardeo de Roma por orden del soberano universal.
Michael O´Brien : "El Padre Elías"
Este autor desarrolla su relato apocalíptico también en estilo novelesco. El personaje principal de las dos novelas que conozco (que forman parte de una trilogía) es un judío converso, que llegó a ser sacerdote de la Iglesia Católica.
La historia narra la aparición de un hombre que tiene una fuerza de atracción impresionante. O´Brien menciona algunos antecedentes de la juventud de este hombre, que hacen pensar que es un personaje verdaderamente cruel. En el marco de la historia, el Padre Elías también se entera de que este político mandó matar a algunos de sus adversarios, y que tiene a su alrededor hombres violentos que ejecutan sus órdenes.
El Padre Elías, que en su momento también había iniciado una prometedora carrera política, recibe de parte del Santo Padre el encargo de encarar a este hombre, para tratar de salvar su alma, exhortándolo a apartarse de los caminos de perdición. Tanto el Papa como el Padre Elías tienen una alta sospecha de que este poderoso político es el Anticristo.
El presunto Anticristo, por su parte, trata de ganarse al Padre Elías y a otros clérigos de alto rango, para que ellos sirvan a sus planes. El libro describe que algunos obispos y cardenales apoyan las iniciativas del Anticristo, y desean, por su parte, edificar una Iglesia más progresista.
En su momento, se da el encuentro entre el Padre Elías y el presunto Anticristo, y el Padre lo exorciza, para permitir que éste pueda decidirse libremente. Pero la historia muestra que el Anticristo no se convierte ; sino que prosigue su rumbo. El final del segundo libro describe cómo el Padre Elías, que para ese entonces ya ha sido ordenado obispo, marcha a Jerusalén junto a uno de sus hermanos, para enfrentarse una vez más al Anticristo.
Éste último se presenta públicamente en el Muro de los Lamentos. Unas cuantas voces se levantan para señalarlo como enemigo de Dios, como Anticristo y como Falso Profeta. Pero la gran mayoría de la muchedumbre está de su parte. Las voces que se oponen son silenciadas y asesinadas. Este mismo final es el del Padre Elías.
Síntesis de las características del Anticristo
Podríamos realizar una síntesis de las características descritas en la Sagrada Escritura, en la literatura y en la profecía acerca del Anticristo, sin pretender hacerlo de forma completa y exhaustiva.
El Anticristo, también llamado "hijo de la perdición" (cf. 2Tes 2,3), se presentará como soberano universal. Mientras que los otros "anticristos" que han existido a lo largo de la historia, tales como los dictadores del siglo pasado, evidenciaron prontamente su crueldad ; el Anticristo aparecerá como un mensajero de paz, dotado de un extraordinario carisma y de los correspondientes poderes políticos para llevar a cabo sus planes. Su manifestación tiene lugar en un momento en que la humanidad atraviesa una gran necesidad, en una época en que el desarrollo permite ejercer un poder global. Hacia afuera dará la impresión de ser un hombre virtuoso y espiritual ; pero su inspiración es de origen demoníaco.
Como su nombre lo indica, se presentará como un redentor, o imitador del Redentor ; pero tratará de ocultar su profunda aversión y enemistad hacia Cristo. Así, pues, podría ser capaz incluso de citar el evangelio, haciendo particular énfasis en aquellos pasajes dedicados a las personas en sus necesidades, para así dar la impresión de que actúa movido por la caridad cristiana y de que es un defensor de la justicia. En realidad, el evangelio proclamado por el Anticristo será un "evangelio intramundano", que niega la trascendencia de Dios y la necesidad de los hombres de ser salvados ; edificando en lugar del verdadero cristianismo una "religión de auto-salvación".
El Anticristo tratará de ejercer su influencia en la Iglesia, queriendo valerse de ella para sus fines y tratando de pervertir la misión que a Ella le ha sido confiada. Conseguirá poner de su parte a un considerable número de cristianos, y causará una enorme confusión en el tiempo de la gran apostasía.
Muchos sospechan que el Anticristo tendrá a su lado una especie de "Falso Profeta", quien previamente habrá preparado el camino para su venida. Lamentablemente no se puede descartar la posibilidad de que este Falso Profeta surja de entre las filas cristianas. Lo que está detrás de la aparente filantropía del Anticristo, saldrá a la luz en el momento en que se le ofrezca resistencia, proveniente en primera instancia del mundo cristiano. Solo entonces mostrará su verdadero rostro, y perseguirá cruelmente a aquellos que se aferran a los mandatos divinos. Algunos sospechan que, bajo la influencia del Anticristo, habrá una "falsa iglesia", que perseguirá brutalmente a la verdadera Iglesia de Cristo. Esta gran tribulación, que en el Apocalipsis dura tres años y medio (cf. Ap 13,5), indica que se trata de un espacio de tiempo limitado de la dictadura del Anticristo, que culminará con el retorno de Nuestro Señor.
¿Cómo se presentará el Anticristo y cómo se revela desde ya el espíritu que prepara su camino ?
Es bastante probable que el último Anticristo no se muestre inicialmente como un autoritario déspota. Él querrá engañar a las personas y ganarse sus corazones. Este plan solo funcionará si mantiene oculto su verdadero objetivo, que es el de adquirir un dominio universal y llegar a sentarse en el trono del mismo Dios (cf. 2Tes 2,4).
Para esconder sus verdaderas intenciones y engañar a los hombres, actuará como si anhelara el mejoramiento del mundo solo por amor a la humanidad. Le resultará más sencillo engañar a una humanidad alejada de Dios que a una que esté firme en la fe. Por eso el espíritu del Anticristo procura, a través de sus discípulos, apartar a las personas de la fe.
Esto lleva sucediendo desde hace ya muchos siglos ; pero en estos tiempos el proceso de decadencia de la fe ha cobrado dimensiones casi apocalípticas. El objetivo es siempre el mismo : distanciar al hombre de Dios. La confiada relación con el Padre, tal como Él la desea, ha de convertirse en hostilidad o indiferencia frente a Él, mientras que las personas han de buscar el sentido de sus vidas únicamente en las realidades de este mundo, haciendo a un lado su dimensión trascendente.
Las dictaduras anticristianas de los últimos siglos tuvieron desastrosas consecuencias, pues dejaron sumidos a los hombres en una profunda ignorancia religiosa, y la fe fue perseguida y ridiculizada. Pero, a pesar de todo, no fueron capaces de aniquilar la esencia religiosa de la persona humana. En cuanto estas dictaduras llegaban a término, muchos volvían a practicar abiertamente su fe.
Por ello, ahora las tentaciones presentan nuevas formas. Parte esencial de esta tentación es reemplazar a Dios con el hombre, y presentar el desarrollo humano como el verdadero sentido y meta de la vida. Por eso, los discípulos del espíritu anticristiano se dirigen a los hombres y les llevan una especie de "falso evangelio". También ellos actúan en calidad de enviados, y prometen la felicidad al hombre si éste se realiza ; si lucha por aquello que desea ; si cumple sus sueños ; si disfruta de su vida…
Se niega cualquier dimensión trascendente y se evade la responsabilidad de la propia vida ante Dios. Por ello, se van eliminando y debilitando cada vez más los mandamientos divinos, que todavía están enraizados en las consciencias humanas e incluso forman parte de las legislaciones de muchos pueblos. Consideremos, por ejemplo, aquella perversión moderna que permite que los niños sean impunemente asesinados en el vientre de su madre ; o el hecho de que las relaciones homosexuales sean igualadas al matrimonio y se permite que constituyan una caricatura de la familia a través de la adopción ; o pensemos también en las leyes que permiten la eutanasia incluso para niños ; entre muchas otras cosas que suceden en nuestro tiempo…
Los discípulos del Anticristo han conseguido que su influencia llegue a ser la opinión políticamente correcta, el'mainstream', en muchos países democráticos. Ellos ya trabajan en erigir una especie de "dictadura del relativismo" a través de la política y de los medios, que no permite que los hombres crean y actúen de acuerdo a valores absolutos.
El socavamiento de los mandamientos de Dios, el enfoque del sentido de la vida sólo en las cosas de este mundo, la desorientación moral, la drástica pérdida de fe, la enajenación de la fe en el ámbito público, la creciente inmoralidad, la manipulación a través de los medios y redes sociales, la globalización de la decadencia occidental con su "cultura de la muerte"… Todos estos son signos de que no estamos viviendo en un "siglo de oro" que brilla por la civilización del hombre ; sino que está siendo preparado un dominio que quiere aprovecharse de la decadencia para usurpar el trono de Dios. La ceguera, que surge como producto del pecado, y la ignorancia acerca del verdadero sentido de vida harán que muchos caigan víctimas de los engaños del Anticristo.