Marcel Lefebvre, director general de los Peregrinos de San Miguel, falleció el 12 de enero de 2022, apenas tres días después de haber sido hospitalizado por problemas respiratorios agudos.
A todos nos tomó por sorpresa, ya que el Sr. Lefebvre estaba en plena forma el día anterior, hablando con nuestros amigos de Canadá y África, y ocupándose de los asuntos cotidianos.
En los días anteriores a su muerte, el Sr. Lefebvre había estado organizando el funeral del peregrino de San Miguel Livain Daigle, que falleció el 4 de enero de 2022 a la edad de 89 años.
Oriundo de Acadieville (Nuevo Brunswick), Livain Daigle dedicó toda su vida al apostolado, especialmente en la gran ciudad de Montreal. Desde 2009, vivía en nuestra sede de Rougemont (Quebec). Hace dos años, el Sr. Daigle fue trasladado a una residencia de ancianos en la ciudad vecina de Saint-Cesaire, donde falleció.
Como había que preparar dos funerales, Monseñor Claude Lamoureux, Vicario General de la diócesis de Saint-Hyacinthe (a la que pertenece Rougemont), ofreció que los dos funerales fueran celebrados al mismo tiempo en la Catedral por el obispo de la diócesis, Monseñor Christian Rodembourg. Este honor fue un reconocimiento a la larga trayectoria de los Peregrinos de San Miguel en la diócesis. Además, se extendió la amabilidad de retransmitir la misa fúnebre en la página web de la diócesis.
La misa de funeral se celebró el 2 de febrero, 2022 Fiesta de la Presentación del Señor en el Templo. He aquí un homenaje a los difuntos realizado durante el funeral por Marcelle Caya, directora de la Junta de Peregrinos de San Miguel:
Es muy fácil hablarles de Marcel Lefebvre. Todos le conocimos bien, y cualquiera sería capaz de rendirle un homenaje si así se los pidieran.
Hemos recibido muchos textos de homenajes de este tipo. He aquí uno de Denis Forget, de Ottawa, Canadá:
"Persona agradable, este gran director nos hacía sentir como un hermano o una hermana. Su cálida acogida, su sonrisa y su risa contagiosas, sus grandes brazos abiertos y su apretón de manos, tan recto y fuerte, son memorables".
En el caso de Livain Daigle, es más difícil, porque era un hombre tranquilo y autodidacta. Leamos y meditemos primero lo que nos dice San Pedro en su 1ª Carta (4,10-11):
"Sirva cada uno a los demás con el don que haya recibido, como buenos dispensadores de la gracia multiforme de Dios. Si alguno habla, sea conforme a las palabras de Dios; si alguno ejerce un ministerio, sea por la virtud que Dios le dispensa, a fin de que el glorificado en todo sea Dios por Jesucristo, a quien es la gloria y el poder por los siglos de los siglos. Amén."
Demos gracias a Dios por el don de la palabra que le dio a Marcel Lefebvre y por el don del servicio que le dio a Livain. Demos gracias a Dios por la gracia de sus bautismos. Demos también gracias a Dios por sus familias que les transmitieron la fe.
Gracias, Marcel, gracias Livian, por haber sido buenos administradores de la gracia de Dios caminando tras las huellas de Luis Even para buscar una sociedad más justa y cristiana. Por el encuentro qy¡ue tuviste con Luis Even, damos gracias a Dios.
Marcel nos contó que de joven acompañaba a menudo a su padre a las reuniones de Crédito Social en Montreal. Se unió al movimiento MICHAEL a tiempo completo cuando sólo tenía 16 años. Gracias, Marcel, por tus 58 años de servicio y dedicación.
Gracias Livain por tus 52 años de servicio y tu colaboración con Louis Even en este gran movimiento.
Todos conocíamos el entusiasmo de Marcel: era convencido y convincente. ¿Quién de nosotros no ha recibido de su mano un CD con las conferencias de Louis Even acompañadas de folletos como "Quiénes son los verdaderos gobernantes del mundo" y otros?
Livain distribuyó incansablemente folletos y se puso a disposición de las visitas familiares para solicitar suscripciones a la revista MICHAEL y a su homólogo en lengua francesa, Vers Demain.
Marcel Lefebvre viajó por todo Quebec y por el Canadá francófono para celebrar reuniones y visitar a las familias. Fue un defensor de la suscripción de otros a Vers Demain, a menudo organizando equipos para distribuir nuestros materiales educativos. Livain siempre formó parte de estos esfuerzos.
Marcel fue a México y a Europa varias veces. En diciembre de 2008, fue a Costa de Marfil, en África, por invitación del padre Patrice Savadogo. Este viaje cautivó su corazón y su mente por la gente de África. Visitó otros países africanos y se comunicó diariamente con sus contactos en el continente. Gracias, Sr. Lefebvre, por una labor tan dedicada.
Livain era de origen acadiano y había vivido en Montreal la mayor parte de su vida. Su trabajo apostólico era en Montreal, donde cada día, con una mochila de folletos, recorría las calles y distribuía nuestros materiales. Conocía todas las rutas de los autobuses urbanos y las estaciones de metro. Livain se incorporó a nuestra sede de Rougemont en 2009 y siempre estaba dispuesto a trabajar en la imprenta y en otros lugares. Gracias, señor Daigle, por su dedicación.
¡Qué bien hace Dios las cosas!
Hoy honramos a dos de nuestros hermanos: uno, el más entusiasta y el más locuaz, y el otro, el más autodidacta y silencioso.
Los peregrinos de San Miguel agradecen sinceramente a S.E.R. Monseñor Rodembourg que haya presidido los funerales de estos dos apóstoles. También agradecemos a S.E.R. Monseñor Lamoureux y a los demás sacerdotes presentes su apreciado apoyo.
Gracias también a todos los peregrinos de San Miguel y a la familia, así como a todos los peregrinos que siguieron esta misa fúnebre por Internet.
Virgen María, bendice a tus hijos y a nuestros dos hermanos, que tantas veces han rezado el Santo Rosario diario.
Hoy, en esta Jornada Mundial de la Vida Consagrada, entregamos a nuestros dos hermanos que han consagrado su vida a Dios; los entregamos a la Divina Misericordia. Que descansen en paz.